Casimiro salia cada mañana a pasear. Entre olores y frescura, frescura de la noche, frescura de la vida. Caminaba bien temprano entre viñas, racimos y uva.
Era sabado y habia convocado a sus hijos a un almuerzo familiar. Preocupado por la finca miraba desde la ventana del comedor, como el paisaje de sus dominios se abria ante sus ojos. Era la tierra de sus antepasados, labrada con esfuerzo y sudores. Que de generación en generación habian pasado hasta llegar a sus manos.
Meses habian transcurrido hasta que el fruto comenzaba a renacer. Ese fruto que con tanto mimo conseguia salir de las profudidades..
Volvia a mirar orgulloso hasta dónde llegaba su pobre vista, sin poder ver el final de sus posesiones que finalizaban en el infinito. "Dura lucha para conseguir lo que tengo. Dura lucha para mantenerlo". Se decia asi mismo, mientras seguia observando atonito el hermoso paisaje.
Le gustaba comparir esa fragancia , ese aroma que con tanta suavidad entraba en la estancia y llenaba de vida, hasta la suya propia.
Reunidos todos sus hijos delante de él, queria anunciarles, que no se sentia ya con fuerzas para seguir al mando del negocio. Era hora de traspasar poderes, era él gran momento de dar la herencia en vida.
Era costumbre, una costumbre que se habia consolidado de padres a hijos desde tiempos ancestrales y ahora le tocaba decidir a él.
-Hijos mios!! Os tengo reunidos aqui como bien sabeis. Para informaros de quien sera el heredero. E l que seguira manteniendo, el honor y el orgullo de la familia. Pero antes tengo que anunciaros que endreis que superar una prueba.
Cada uno de vosotros teneis que decirme lo hariais con la herencia si fueseis escogido y partir de aquí vuestra madre y yo decidiremos, lo que más convenga.-
se mantuvo el silencio en la sala.
-Decirme hijos mios. Decirme Mateo, Castro y Fermín proponer vuestras ideas.-
Mateo era le mayor y fue el primero en levantar la mano
-Puedes hablar,Mateo.-
-Padre.-
Comenzo con un poco de tímidez Mateo
-Padre yo venderia las tierras y viviria en la casa grande. Mantener la finca es uy caro. S enecesita mucho dinero para modernizarla y la cosas no pintan bien. A parte yo ya tengo una hipoteca yembarcarme en más deudas. Me seria imposible mantenerlas todas. Lo siento padre no se que más se puede hacer.-
-Bien Mateo. Gracias por tú intervención, te agradezco la sinceridad. Ahora tú Castro es tú turno que tienes que decir.-
-Padre, yo pienso que podriamos vender parte de las tierras y de esta forma , coseguir más dinero. Con el dinero modernizar las tierras y hacerlas más productivas. Aparte yo venderia mi casa y de esta forma podria venir a vivir a la casaq grande. De esta forma podria ahorrar gastos y ser más eficaz economicamente.-
-Puede ser una buena idea pero, ahora le toca a Fermín-
Contesto el padre.
Fermín és tú turno.-
-Padre soy él más joven de la familia y no se, si sere capaz de estar a la altura de las circunstancias. En principio pienso que si todos fuesemos a vivir juntos, basicamente no tendriamos tantos gastos y podriamos pedir un prestamo. mayor. Conseguiriamos suficiente dinero y podriamos modernizar las tierras y la casa.
La casa tiene tres plantas, las suficientes como para poder vivir las tres familias. De esta manera podiamos trabajar juntos con un esfuerzo común . La visión de las cosas seria más amplia dentro del entorno de la familia y la empresa tendris un más rapido poder de decisión.-
Casimiro se sorprendio de las ideas que tenia su hijo, las razono con cautela y las delibero con su mujer. Pasados unos minutos en nombre del candidato ya estaba elegido.
-Vuestra madre y yo, hemos creido que la persona que hemos considerado más adecuada para seguir con el legado de la familia és: Fermín.-
Sus dos hermanos Mateo y Castro quedaron un poco decepcionados pero, respetaban la decisión con firmeza.
-Hijos mios, espero que la decisión sea la adecuada y vosostros mismos la sepais llevar hacia delante. Son tiempos dificiles, tanto, para vosotros como para mí. Respetarla y vivir en paz.-
Fermín escucho las palabras de su padre y levanto la copa de vino.
-Busquemos la unión hermanos, vivamos juntos, trabajemos juntos y tiremos juntos el proyecto de nustra casa, de nuestra familia. Sólo juntos sobreviviremos.-
-¡¡¡¡Juntos!!!! Dios bendiga a Fermín.-
Llenaron las copas y juntos brindaron con la sangre de su tierra, con la sangre de sus antepasados que aún estaba viva y presente frente a ellos. Casimiro miraba a sus hijos, miraba a traves de la ventana y con una alegria desbordante en su cara. Penso que el paso ya lo habia dado. De nuevo una antigua tradición, pasada de pares a hijos, seguia viva. ¿Hasta cuando?.... Se volvia a preguntar. Deseaba que no fuese esta la última vez en que se parara el testigo y que el esfuerzo de generaciones no acabara núnca. En realidad, él no tenia la respuesta.....sólo el futuro nos podria contestar.......sólo el futuro nos daria la respuesta......