Sentado, junto a la ventana, del frio invierno de Marzo, mientras miraba el estrellado cielo que delante de mí, aparecia entre mis ojos. Su imagen se proyectaba en la oscuridad de la noche, mientras que en el interior de la habitación el calor hacia más agradable la estancia. Mi mente no paraba de pensar en ella, esa mujer que me tenía el corazon cautivado. Cuantas veces al dia, se me proyectaba la imagen, sin poderse borrar alterandome, mi trabajo, mi persona, mi vida.
Por las mañanas cuando oia su puerta, salia de mí piso disimuladamente, para intentar coincidir en la escalera accidentalmente. Su belleza y su olor era tal, que embriagaba no sólo el ambiente, sino todo mi cuerpo.
Cuando no coincidiamos algún dia por que nuestros horarios habian cambiado, yo la esperaba a la tarde en la escalera, disimulando con cualquier trabajo domestico. Para mi lo más importante era encontrarla, verla, entablar aunque sólo fueran unos segundos una pequeña charla o que me regalara una dulce sonrisa despúes de un saludo.
Mirando por la ventana, mi melancolia aumentaba por segundos, por minutos, pero en realidad tenia que ser realista. Era dificil la empresa que una mujer de tal belleza y simpatia pudiese fijarse en mí como algo más que un vecino simpatico y amable.
Seguia mirando el cielo y de repente vi una inmensa estrella fugaz y formule un deseo. Dicen que cuando ves una estrella fugaz y, más una estrella de las dimensiones como la que habia visto, que habia iluminado todo el firmamento, los deseos se cumplen. Cerre los ojos con todas mis fuerzas y lo formule. Núnca habia desado algo con tanta fuerza y segui mirando el firmamento.
De repente en aquel momento, sono el timbre de la puerta, fuí abrir... Y una imagen se me rebelo....era ella
1 comentario:
eres el mejor
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